Apostando a la energía solar como fuente que a largo plazo reduce los costos en la energía y beneficia a la reducción de GEI.
El sistema energético mundial está atravesando un período de ajuste y transformación por un conjunto de factores vinculados a la demografía, economía, y sobre todo al cambio climático.
En los últimos cuarenta años la población ha aumentado de 4000 millones a 7000 millones, la mayor parte de esta población es de clase media y vive en ciudades. En el mismo tiempo la generación de energía se incrementó un 250%.
Hacia 2030 la población superará los 8000 millones y más de 5000 millones vivirán en sectores urbanos, se considera que la producción de energía se va a incrementar en un 70% de aproximadamente 22.000 millones de teravatios-hora a 37.000 millones en 2030.
Es de público conocimiento que más del 40% de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) a nivel mundial son producto del sector energético y cada vez más alto es el consenso que la amenaza del cambio climático se produjo por el incremento de estos gases en la atmósfera. El cálculo de aumento de energía y la amenaza climática llevaron a que el mundo adoptara iniciativas para transformar el modelo energético.
La implementación de energías renovables tiene un costo de inversión frente a un costo de operación relativamente alto, por lo que su viabilidad depende del costo de capital. Se establecieron en algunos países diversos mecanismos de ayuda financiera que incluyen desde ayudas gubernamentales hasta proyectos de crowdfunding (financiamiento colectivo) para iniciar la transición hacia un modelo energético sostenible. La experiencia dice que a medida que aumenta su incorporación los costos comienzan a disminuir.
Incorporar, por ejemplo, paneles solares en las viviendas particulares representa para los pequeños inversionistas “una decisión que no pueden medir”. ¿Por qué? Pues es una inversión que implica un gasto importante y que no logran calcular el período de amortización (o si se amortiza).
Google es consciente de este problema y creó el proyecto “Sunroof” o “Techo Solar” que involucra la utilización de la tecnología para medir la utilidad de las casas en la implementación de energías de tipo renovable. Utilizando el poder de los datos y la información que Google genera con sus proyectos (Maps, por ejemplo), Sunroof permite calcular la cantidad de energía que un techo recibe en un año.
A través de las imágenes aéreas, Google Maps, junto a un diseño 3D del techo, considerando las sombras de los edificios cercanos, árboles y un histórico de las nubes y su afectación. Conociendo lo anterior, el proyecto posibilita crear datos que permiten conocer cuánta energía podría generarse en un hogar y hacer cálculos certeros sobre el coste de instalación de energía solar de cara a la factura de electricidad que llega al domicilio.
Además, a través del sistema de geo localización permite mostrar al usuario cuál es el proveedor de paneles solares más cercano al hogar. Por el momento el proyecto se encuentra disponible en algunas ciudades como Boston, pero planea alcanzar a todo el mundo.
Si una empresa como Google facilita la incorporación de este tipo de energías a nivel individual, sumado al marco internacional a partir de la interacción vinculante entre los países crea los compromisos necesarios mediante los INDC (Contribuciones Nacionalmente Determinadas) y a partir de estos los países aportan creando políticas públicas que favorezcan esta visión, el camino hacia los 2° C como meta a limitar el aumento de la temperatura del planeta, se hace más visible.
Según la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) son buenas para la economía de un país, porque el objetivo de una cuota entre el 14% y 16% en hacia 2030, puede generar beneficios dos o tres veces superiores a sus costes. Asimismo se observan beneficios a lo largo de la cadena de valor, porque permiten crear empleos y mejorar las industrias nacionales.
No obstante, la mayor beneficencia es ofrecer una vía para la reducción de los gases de efecto invernadero (GEI) , los mayores causantes del cambio climático a nivel global.
Originalmente publicado en: Energías renovables: Transformando el sol en monedas.