A partir de los datos de 21 modelos, un equipo científico ha profundizado en los efectos del cambio climático sobre los eventos de La Niña más extremos.
El Niño y La Niña son los nombres dados a la fase cálida y fría, respectivamente, del fenómeno océano-atmósfera a gran escala denominado ENOS (El Niño-Oscilación Sur). Investigadores de China, Australia, EE UU, Reino Unido, Francia y Perú han profundizado en uno de estos fenómenos, el de La Niña, para determinar el efecto del cambio climático sobre los eventos más extremos.
Ken Takahashi, del Instituto Geofísico de Perú, explica -en una nota de la Agencia Iberoamericana para la Difusión de la Ciencia y la Tecnología– que El Niño es un fenómeno referido al calentamiento inusual del mar en la costa oeste de Sudamérica, que puede producir grandes lluvias en esta región normalmente seca. Su conceptualización se produjo hace más de un siglo, mientras que el término de La Niña tiene solo 30 años y concierne a la observación de enfriamientos inusuales a lo largo del Pacífico ecuatorial central-oriental, no solo de calentamientos.