La emisión de dióxido de carbono -causa del cambio climático- está provocando una acidificación del agua que destruye la vida de los corales. Advierten que incluso un ‘buen acuerdo’ en la cumbre de París no será suficiente para salvar los arrecifes.
Expertos internacionales advierten que incluso con un buen acuerdo en la Cumbre del Clima que se celebrará en diciembre en París, los arrecifes de coral de todo el planeta pueden estar sentenciados a muerte como consecuencia de la acidificación del agua provocada por la imparable acumulación de dióxido de carbono.
La Gran Barrera de Coral de Australia se ha salvado este año de la amenaza que suponía el vertido de materiales de dragado de puertos. La protesta internacional obligó el pasado mes de marzo a las autoridades australianas a reconsiderar esta actuación que amenazaba la vida marina en centenares de kilómetros de costa. Pero la contaminación, los daños causados por la pesca de arrastre o la extracción de corales para joyería y decoración sólo son pequeñas amenazas si se comparan con el enorme impacto que tiene -y tendrá- el cambio climático en la formación y conservación de los grandes arrecifes de coral de todo el planeta.