ConexiónCOP resume los puntos más resaltantes del nuevo texto de negociación de la COP21 presentado al cierre de la primera semana de negociación. Sin duda, estos temas marcarán el debate necesario para cerrar un nuevo acuerdo mundial al finalizar esta cumbre climática.
Para dar a conocer el estado actual del documento borrador del acuerdo climático, ConexiónCOP presenta un resumen de los temas más críticos rumbo al texto definitivo del acuerdo global que se espera alcanzar al final de la COP21.
Descarga el texto oficial aquí (en español).
Entre estos temas, destacan los avances en el mecanismo de pérdidas y daños -en apoyo a los países más vulnerables frente al cambio climático-, la posibilidad de aumentar la ambición climática a 1.5°C y la poca claridad para los temas de financiamiento, un aspecto clave para lograr un acuerdo global.
Asimismo, Manuel Pulgar Vidal, ministro del ambiente de Perú y presidente de la COP2O, sostuvo en una conferencia de prensa que el nuevo documento facilitará la negociación en la segunda semana de la COP21. Explicó que el Grupo de Trabajo sobre la Plataforma de Durban para una Acción Reforzada (ADP, por sus siglas en inglés) cumplió con entregar un documento manejable y claro en la primera semana para que los ministros de los 195 países de la Convención puedan lograr un acuerdo mundial. Las negociaciones se retomarán el lunes 7 de diciembre.
Se mantiene el mecanismo de pérdidas y daños. El texto borrador conserva este mecanismo que establece pautas para que las poblaciones más vulnerables puedan ser compensadas frente a las consecuencias del cambio climático, tales como eventos extremos y el incremento del nivel del mar. Esto significa que existe voluntad de las Partes para que los más vulnerables puedan recuperarse. La forma de cómo se procederá se conocerá la próxima semana.
Esperanza para el 1.5°C. El nuevo borrador del futuro acuerdo -que cuenta con 48 páginas-, indica que aún existe oportunidad para que los esfuerzos de los países se enfoquen en mantener la temperatura del planeta por debajo de 1.5°C, y no tan sólo en 2°C. Sobre la discusión de la temperatura (1.5 o 2 grados), el ministro peruano sostuvo que una reunión como la COP21 tiene que ser capaz de implementar significativamente la ambición.
“ Me parece positivo que ya exista un consenso que antes no se tenía, para saber que no podemos bajar la meta de los 2°C, por las consecuencias catastróficas que el mundo enfrentaría. Si más adelante la ambición aumenta a 1.5°C, será producto de un trabajo coordinado a nivel global”, indicó.
Se mantienen los objetivos de largo plazo. El borrador mantiene tanto el objetivo a largo plazo como el objetivo mundial de adaptación, pero aún quedan muchas opciones por definir en la segunda semana.
Derechos humanos por incluirse. La necesidad de que el acuerdo incluya un enfoque de derechos humanos es aún una posibilidad. Sin embargo, existen varios países desarrollados que no están de acuerdo.
La cuestión de la diferenciación. Las «Responsabilidades comunes pero diferenciadas» es todavía uno de los temas que más trabajo está generando a los países. Hay países que empujan para cambiar la barrera que divide las naciones desarrolladas y las que están en desarrollo, por eso aún no está claro que pasará. Al respecto, Enrique Maurtua, de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), comentó lo siguiente:
“Es muy importante que el tema de la diferenciación esté claro, porque los países de Latinoamérica no tienen estatus de países menos desarrollados y tampoco tiene un rol de un gran poder económico, para poder asumir compromisos a gran escala y que no se podrían cumplir. Es muy importante que las diversas capacidades estén reflejadas en el texto”, explicó Maurtua.
El financiamiento necesario. El texto sobre financiación casi no ha cambiado, y mantiene los temas claves son quién financiará, para qué y cómo se mantendrá en el tiempo. Sobre ello, Marcela Jaramillo, experta en políticas del Programa de Financiamiento Climático Internacional de E3G explicó el nuevo texto menciona la necesidad de que el financiamiento sea consistente.
“Es fundamental definir cómo será el financiamiento, y también se necesita claridad sobre la ambición pre 2020. Sin embargo, definir el financiamiento necesario para una transformación mundial baja en carbono y con resiliencia climática, está aún en discusión. Venezuela, por ejemplo, no acepta esa opción.”, sostuvo Jaramillo.
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