Los migrantes ambientales deben buscar refugio para sobrevivir a consecuencia de los efectos devastadores del cambio climático. ¿Cuáles son los riesgos a los que se ven expuestos y qué áreas se ven afectadas por los desplazamientos forzosos? Especialistas responden a estas y otras interrogantes en este reportaje de ConexiónCOP.
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“El aumento del nivel del mar destruirá para siempre zonas amplias y productivas de baja altitud, cercanas a la costa, habitadas por millones de personas, que tendrán que marcharse a vivir permanentemente a otro lugar”, sostiene.
“El desplazamiento forzado es la consecuencia de la incapacidad para adaptarse localmente a las condiciones cambiantes”, indica Juan Carlos Riveros Salcedo, Director de Conservación de World Wildlife Fund (WWF). Agrega que, durante muchos años, los principales agentes de desplazamientos han sido la violencia y los desastres naturales que impactan la producción agrícola.
“En nuestros días, la frecuencia de eventos climáticos extremos, como sequías, inundaciones o aludes han aumentado y por las condiciones de vida de poblaciones, incluso las económicamente solventes, se han visto afectadas severamente”, sostiene.
Áreas afectadas por los desplazamientos forzosos
Jesús Marcos Gamero, investigador en la Alianza Clima y Desarrollo (CDKN, por sus siglas en inglés), dice que la región caribeña es una de las zonas más afectadas por el cambio climático y por lo tanto donde existirán mayores personas con calidad de refugiados o como migrantes ambientales.
“Las limitaciones territoriales, los eventos climáticos extremos, las sequías o el aumento del nivel del mar, amenazan en conjunto a las economías y poblaciones más empobrecidas y se añaden como un factor cada vez de mayor importancia a la hora de reforzar las desigualdades sociales y la tendencia a la migración de sus habitantes”, explica.
Algunos de los problemas con los que deben lidiar los migrantes ambientales están ligados a las barreras de lenguaje, nacionalidad o estatus migratorio, además de la falta de redes de apoyo. Sobre ello, Carlos Gonzales indica que cuando los desplazamientos se realizan hacia los centros urbanos, el problema surge cuando las ciudades no tienen una correcta planificación urbana y no cuentan con un manejo territorial para la recepción de migrantes medioambientales.
“El problema se profundiza en la medida que todos los servicios públicos como el agua potable, acueducto y vivienda, entre otros, sobrepasan la capacidad instalada de las ciudades. De tal manera que los asentamientos no solo presentan una gran carga a la oferta de las municipalidades, sino en el deterioro de las zonas rurales continuas; cuando la población desplazada se asienta en los alrededores de las ciudades, algunas veces degradando los ecosistemas, engrosando los cinturones de pobreza y propiciando proliferación de enfermedades”, indica.
El especialista sostiene que dos áreas serán especialmente afectadas por los desplazamientos forzosos:
La seguridad alimentaria:
El desplazamiento por causas ambientales afecta la seguridad alimentaria, específicamente por la restricción en la producción de alimentos, no solo por el estrés ambiental sino por la disminución de la oferta y producción de alimentos. Profundiza la vulnerabilidad en el aseguramiento de los alimentos, un factor fundamental para el bienestar de las poblaciones.
La economía:
Con una disminuida oferta de alimentos al interior de un país, y bajo el principio de escasez en economía, los precios de los productos aumentarán, afectando la capacidad de compra real de las personas, especialmente las de ingresos más bajos y nivel socioeconómico medio. En este caso el papel del comercio internacional o intracomunitario es fundamental para la disponibilidad de alimentos. Sin embargo, el efecto del cambio climático no solo regional es también global, poniendo la oferta de alimentos de un país a depender de los niveles de eficiencia de otros, sujetos a sus precios, calidades etc.
Una solución: la adaptación
Juan Carlos Riveros sostiene que, en términos generales, los Estados deben desarrollar Planes Nacionales de Adaptación que consideren la vulnerabilidad de los diversos sectores de la población al cambio climático.
“Estos planes tienen protocolos establecidos por Naciones Unidas en cuanto a proceso y contenido, por lo que no debiera ser difícil desarrollarlos en cuanto exista percepción de su importancia y urgencia. Por otro lado, hay que considerar que la migración planificada también puede ser una alternativa para lidiar con el calentamiento global y así evitar que las personas movilizadas se conviertan en refugiados. Esta es una medida extrema, pero en ocasiones puede ser la última solución viable para una comunidad en particular”, finaliza.
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DATOS
MIGRANTES CLIMÁTICOS Y LA COP
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Ni la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático ni el Protocolo de Kioto incluyen las disposiciones específicas relativas a la asistencia o la protección para quienes sean afectados de forma directa por los efectos del cambio climático.
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Actualmente quienes se desplazan dentro de las fronteras existentes o se trasladan voluntariamente están protegidos por el Derecho Internacional. Los que son desplazados por la fuerza son resguardados por los Principios Rectores de los Desplazamientos Internos.
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Fuentes usadas para este artículo
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[raquo_list_item]Cambio climático, migración y desplazamiento: ¿Quién resultará afectado?[/raquo_list_item]
[raquo_list_item]El ACNUR y el cambio climático: Participación, retos y respuestas[/raquo_list_item]
[raquo_list_item]Alianza, Clima y Desarrollo[/raquo_list_item]
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