El tiempo de la vendimia lo marca la temperatura registrada en el año y su aumento ha adelantado progresivamente la fecha de las cosechas en todo el mundo.
El cambio climático ha alterado una de las etapas clave en la elaboración del vino en regiones de Francia y Suiza, lo que podría obligar a variar los tiempos y técnicas de producción, revela un estudio publicado por la revista Nature.
La investigación, desarrollada por el Instituto de la Tierra de la Universidad de Columbia (EE.UU.), presenta una prueba más de que el aumento de las temperaturas a nivel global está afectando a los sistemas biológicos y a la agricultura de una manera muy local.
Los autores recuerdan que varios factores influyen en la elaboración de buenos caldos, como la variedad de la uva, las prácticas de vendimia, la localización del viñedo o la calidad de la tierra y, por supuesto, el clima, cuyas variaciones de año a año tienen una gran incidencia.
En algunas regiones francesas y suizas, en especial aquellas con temperaturas relativamente más bajas que otras zonas vinícolas, los mejores años son los que disfrutan de primaveras de abundantes lluvias, seguidas por veranos excepcionalmente calurosos y de una última etapa de sequía.