El humo negro que sale de los vehículos, el hollín de las chimeneas industriales, de las estufas de leña y de los incendios forestales es el carbono negro, un contaminante que daña la salud e interviene en el cambio climático del planeta.
El humo negro que sale de los vehículos (sobre todo de los que usan diésel), el hollín de las chimeneas industriales, de las estufas de leña y de los incendios forestales es el carbono negro, un contaminante que daña la salud e interviene en el cambio climático del planeta.
Se trata de un compuesto volátil, cuyas pequeñas partículas de 0.1 a 0.5 micras penetran en el tracto respiratorio y afectan sus funciones, afirmó Xochitl Cruz Núñez, investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA) de la UNAM en una nota que publica El Sol de México.
«Entre las partículas que emiten los combustibles fósiles y los biocombustibles figura el carbono negro, un conglomerado de partículas en estados sólido, líquido y gaseoso, que tienen gran cantidad de hidrocarburos y, al ser volátiles, se desprenden y pasan con facilidad a la fase gaseosa», señaló la maestra en ciencias químicas.
Esta infografía del Colectivo Ecologista Jalisco muestra los tipos de contaminación generados por vehículos y el daño que hacen al ambiente en México.