El dispositivo espacial podrá medir el crecimiento de la biomasa forestal y como se correlaciona con una cantidad de carbono secuestrado.
El primer satélite de Costa Rica y Centroamérica –llamado proyecto Irazú– está más cerca de entrar en órbita para monitorear el cambio climático. El lanzamiento de este dispositivo espacial está programado para el segundo semestre del 2017 y para poder concluir la ejecución del proyecto hacen falta $75.000. El 21 de marzo se lanzó una campaña de recaudación de fondos a través de la plataforma digital Kickstarter.
El satélite es una iniciativa de la Asociación Centroamericana de Aeronáutica y del Espacio (ACAE) y el Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR), con el apoyo de varias empresas patrocinadoras.
Además del satélite, se instalará una estación remota en una plantación de árboles de melina, ubicada en Los Chiles, en la zona norte de Costa Rica. Contará con 10 dendrómetros, instrumentos para medir el crecimiento de los árboles y la captura de carbono.
Ahí también funcionará una estación meteorológica de modo que se analizará el crecimiento forestal en relación con las variables climáticas.