Han obtenido hasta el momento 58 híbridos distintos a partir del cruzamiento de variedades autóctonas de berenjena.
Investigadores de la Politècnica de Valencia (UPV) lideran un proyecto internacional para conseguir berenjenas más resistentes al cambio climático, resistentes a condiciones extremas de temperatura y sequía, así como a diversas patologías.
Según ha informado la UPV, investigadores del Instituto Universitario de Conservación y Mejora de la Agrodiversidad Valenciana (Comav), junto con expertos de Sri Lanka y Costa de Marfil, participan en EggPrebeed, un proyecto que se centra fundamentalmente en la adaptación al cambio climático de este cultivo en el sudeste de Asia y África Occidental.
«El cultivo de berenjena es uno de los 35 más importantes a nivel mundial para la seguridad alimentaria, fundamentalmente en las zonas tropicales y subtropicales, las que más sufren el cambio climático, y por ello están trabajando en el cruce de especies silvestres con variedades propias de la zona como estrategia previa al desarrollo de nuevas variedades más resistente», indican.