Ha surgido una corriente de prácticas agrícolas regenerativas que buscan luchar contra las enfermedades que afectan a los cultivos y contra otros procesos que degradan el suelo donde esta actividad se realiza. Lo hacen de forma similar a lo que hacían los Incas.
El Perú es país de origen de la papa y por lo tanto así como esta existe hace miles de años y tenemos más de 3 mil variedades, por esa misma condición soporta una gran cantidad de plagas o enfermedades que afectan las distintas variedades. Esto hace casi imposible la exportación de papa fresca. En la antigüedad, la sabiduría inca hacía dos cosas para luchar contra las plagas:
En la actualidad, cada vez más y por distintas razones los agricultores son testigos de la degradación del suelo, la sequía y también las plagas, de lo cual normalmente se acusa al cambio climático, o a los impactos de otras actividades económicas.